viernes, 9 de enero de 2015

Catalina de Erauso, La Monja Alférez

Catalina de Erauso, 'La Monja Alférez'

PRIMEROS AÑOS. CONVENTO Y HUÍDA

Catalina de Erauso y Pérez Galarraga, nació en 1585 en San Sebastián, Guipúzcoa, bajo el amparo de una familia bien relacionada y acomodada. Hija de un alto militar de la Corte de Felipe III y con un montón de hermanos varones, desde pequeña jugaba a pelear, y no le fue difícil aprender el manejo de la espada. Siendo muy niña, entró en el convento de las Dominicas en el Antiguo, junto a la playa de Ondarreta, pero esa no era su vocación. Después de una serie de altercados, con un traslado a otro convento más rígido de por medio, es recluida en su celda a los 15 años, pero en un descuido durante la noche de San José de 1600, se hizo con las llaves del convento y escapó, se cortó el pelo como un muchacho y consiguió ropa de hombre: Catalina era ahora Francisco Loyola (aunque posteriormente adoptaría otros nombres), y empezaba la aventurera vida de La Monja Alférez.
Lugar donde estaba el Convento de Domincas del Antiguo
Con su recién conseguida libertad, va a Vitoria, y después a Valladolid, donde se encontraba la corte, para entrar a servir de paje al secretario del Rey. pero huye de allí al coincidir un día con su padre, ante el riesgo de ser descubierta. Va a Bilbao, ciudad en la que por primera vez pisa la cárcel tras una pendencia. Al salir se encamina a Estella, y posteriormente, en 1603 a su ciudad, San Sebastián, donde sirvió a su tía Úrsula, acudiendo incluso a oir misa al convento del que escapó 3 años antes. Entonces decide viajar a América, por entonces tierra de prosperidad. Viaja a Sanlúcar y se enrola como grumete en un galeón de su tío Esteban Eguiño con destino a Punta Araya, en la actual Venezuela.


Castillo de Araya, primer lugar de América que pisó

AMÉRICA. PANAMÁ, PERÚ Y CHILE

Tras pasar por Cartagena de Indias, llega a Nombre de Dios, Panamá. Poco antes de que el galeón partiera de vuelta a España cargado de plata, roba a su tío 500 pesos y vuelve a huir. Después de servir a un comerciante vasco en Panamá (Juan de Ibarra), pasa a servir a otro (Juan de Urquiza), con el que viaja a la costa norte de Perú, primero a Trujillo, después a Paita y finalmente a Zaña, o Saña. Es aquí donde mata por primera vez, a 'un tal Reyes', con el que pelea por una tontería. El corregidor, vasco igualmente, reconoce en él a un paisano y le deja escapar. Se le ofrece casarse con una dama, conocida de su amo, a lo que se niega en redondo. Se va de allí, primero a Trujillo y después a Lima, donde trabaja para otro comerciante vasco, Diego de Lasarte. Pero tras alguna 'aventurilla' amorosa con una cuñada del amo, es despedida y se alista, bajo el nombre de Alonso Díaz Ramírez de Guzmán, como soldado en la Compañía que se estaba formando en Perú para la reconquista de Chile, tras las revueltas mapuches que esporádicamente duraban ya cerca de un siglo. Llega a la ciudad chilena de Concepción. Es su primer contacto con el Ejército.
Plano de la bahía de Concepción, en Chile

EJÉRCITO Y GUERRA. LA MONJA ALFÉREZ.

Allí permanece tres años, acogida en casa de su hermano, Miguel de Erauso, sin que éste sepa que se trata de su hermana Catalina. Pero una disputa con él, una vez más a causa de un problema de faldas, le lleva a Paicabí, en tierra de indígenas, donde demuestra gran valor y también gran crueldad. En la Batalla de Valdivia gana el grado de Alférez que desde entonces la distinguiría. Vuelve a Concepción donde mata al Auditor General, y, más tarde y por error, a su propio hermano, lo que la hace refugiarse, una vez más, en sagrado. Huye cruzando los Andes a Argentina, en la que probablemente es su mayor aventura: junto a dos compañeros y tres caballos comienza su huida. Sus compañeros y las bestias mueren de hambre y frío, pero ella es capaz de llegar a Tucumán. Y de ahí a la actual BoliviaPotosí y después a La Plata, Cochabamba y La Paz, , y de nuevo a Perú, Cuzco y Lima... Y siguió participando en las campañas contra los indios sublevados y contra holandeses, así como en reyertas de faldas y juego, que le costaron incluso una sentencia de muerte y absoluciones tras graves heridas.

Ruta de La Monja Alférez en su primera etapa en América

LA CONFESIÓN. DE VUELTA A ESPAÑA

Su estrategia tras estos asesinatos y reyertas era un recurso muy habitual en aquella época, 'acogerse a sagrado', es decir, refugiarse en una iglesia o convento donde no podía ser hecha presa por la autoridad civil o militar. Tras una pendencia en Huamanga vuelve a refugiarse en un convento, y es entonces cuando, creyéndose cerca de la muerte, confiesa su condición de mujer. Al saberlo, el Obispo hizo que la reconocieran unas matronas, que certificaron que era mujer y, además, virgen. Recibió apoyo eclesiástico y así, vuelve a España como mujer. Es recibida con honores por el Rey Felipe IV quien la reconoce el grado de alférez, pasando su historia de boca en boca, hasta Roma, donde el Papa Urbano VIII la hace llamar. Tras conocerla, la absuelve de todos sus pecados y la permite seguir vistiendo y actuando como hombre, a cambio de que abandone las pendencias y la mala vida. Parece que lo de ser virgen la ayudó a tener cierta 'simpatía' por parte del clero. Se traslada a Pamplona, y es entonces, en una época de 'paz vital', cuando aprovecha para escribir sus memorias.
Fotograma de la película de Javier Aguirre

... Y VUELTA A AMÉRICA. ÚLTIMOS AÑOS EN MÉXICO

Pero en 1630 su espíritu aventurero la hace volver a América, ya como Antonio de Erauso, nombre que conservaría hasta su muerte. Se instala en Veracruz y monta un negocio de transporte de mercancías. Desde 1635 poco se sabe de su vida, hasta su muerte en 1650, que tuvo lugar en Cuitlaxtla, cerca de Puebla, posiblemente en un naufragio o en una emboscada, y poco a poco desparece de la memoria colectiva. A mediados del siglo XIX una edición francesa de las memorias de Catalina de Erauso la devuelve a la actualidad, desde entonces se escriben varios libros y, ya en el siglo XX, se ruedan dos películas, una mexicana, de Emilio Gómez Muriel en 1944, y otra española, de Javier Aguirre en 1987 y protagonizada por Esperanza Roy.


CURIOSIDADES

- Llaman la atención las coincidencias anónimas con familiares que tuvo durante su vida, su tía Úrsula, su tío Esteban, su padre, su hermano Miguel... Esto ha sido causa de sospechas acerca del posible fraude en su autobiografía.

- También son muy numerosas las relaciones con otros vascos como ella en América. El corregidor de Trujillo, los distintos comerciantes a los que sirvió en Panamá y en Lima, algunos de sus mandos militares... Pero esto quizá llame menos la atención. Al fin y al cabo, ¿con quién se sentirá más a gusto alguien en tierra extraña que con paisanos?

- Por motivos obvios, Catalina de Erauso se ha acabado convirtiendo en uno de los mayores iconos del movimiento LGBT. Y curiosamente, Luisa Revilla se convirtió no hace mucho en la primera alcaldesa transexual de Perú. Y lo es de la ciudad de Trujillo, la primera localidad peruana en la que vivió la Monja Alférez.


MÁS ENLACES

Libros:
- Historia de la monja alférez, de Catalina de Erauso. Es la autobiografía. Algunos la consideran apócrifa
- La monja alférez: La juventud trasvestida de Catalina de Erauso, de Ricard de Ibáñez.

- Adonde quiera que te lleve la suerte, José Luis Hernández Garví, trata de las mujeres que vivieron la aventura americana en los siglos XVI a XVIII.

Otros enlaces de interés:
- Artículo dedicado a Catalina de Erauso, en Euskomedia. Es completísimo.

- Podcast del programa dedicado a Catalina de Erauso en Documentos, de RNE
- Artículo sobre el travestismo y la condición sexual de Catalina de Erauso. Muy interesante

No hay comentarios:

Publicar un comentario